martes, 18 de agosto de 2009

Poema coloquial II (Rubén Boggi)

De repente, un sol se apaga en el rapto fugaz
de una serpiente.

Se mira la gente como enlutada, entre aromas de albahaca,
y la calle se ha puesto un poco loca,
un poco repleta de semáforos y bocinas,
un poco atisbada entre piquetes, entre humo negro, entre pechos
que arden y son tuyos,
inevitablemente.

Tienen la política entre las piernas, y la ideología se dispara
entre suspiros como una automática del primer mundo.

Dame de nuevo una manzana, dame ese rapto fugaz entre luces rojas
y soles apagados,
dame el deseo, devolvelo, turra diosa de esperanto que nadie
entiende pero todos ambicionan.

Vení, retorná, felicidad amable.
Todos te añoran, lo aseguro.